Siguiendo la tradición, las argollas de matrimonio en total son tres; dos anillos para la mujer (el anillo de compromiso y la argolla de matrimonio ) y una argolla de matrimonio para el hombre. Las argollas o anillos de Matrimonio son joyas que vas a usar durante toda tu vida de casado y son el símbolo del amor y de la unión; por lo mismo son parte importante de tu evento.
¿De dónde viene el concepto de los anillos o argollas de Matrimonio?
Se tiene documentado que desde la cultura egipcia, unos 2800 años AC, ya existe la costumbre de intercambiar anillos de matrimonio o unión de una pareja.
En su cultura el círculo representaba la eternidad pues no tiene ni principio ni fin y esto era la promesa del matrimonio, la eternidad.
Esta costumbre también existe entre los romanos y judíos antes del cristianismo con algunas connotaciones diferentes porque la entrega del anillo a la mujer (que tiene una llave soldada) representa el sello de las cosas de la casa, es decir la custodia de cajones, arcas, alacenas y todo lo que necesitamos cuidado y administración.
Esta tradición de los anillos continúa con la consolidación del cristianismo. En la Biblia, en el Antiguo Testamento se pedía la mano de la novia con un anillo.
Esta costumbre ha llegado hasta nuestros días. En el siglo IX, el Papa Nicolás I, decreta que el hecho de entregar el anillo a la novia es ya una declaración oficial de la intención de casarse. Por fuera de las argollas de matrimonio el anillo de compromiso ya es una costumbre más occidental que se entrega como símbolo de la intención de contraer matrimonio, tradicionalmente es ofrecido por el hombre como regalo a su novia mientras ella accede a la proposición de matrimonio.
Representante de una aceptación formal del futuro compromiso. Inicialmente, los anillos de matrimonio se hicieron de hierbas, luego fueron sustituidos por materiales como el cuero, sin embargo, por el rápido cambio de estos en algún momento, empezaron a hacerlos con piedras pulidas.
Luego, con el avance en el manejo de los metales se empezará a hacer argollas en hierro. El uso de los metales preciosos vino como una consecuencia de su brillo y de su valor que comenzó a marcar una diferencia y un estatus entre quienes tendrían un anillo de oro o de plata.